Salvador Fuentes: “El mundo cofrade es una fuerza social y espiritual que no podemos permitirnos ignorar”

El presidente de la Diputación de Córdoba participa en el cierre del centenario de la fundación de los Enlutaos y reivindica el papel de la Iglesia, las cofradías y el patrimonio como pilares de cohesión y ayuda social.

En un acto cargado de simbolismo, fe y emoción, el presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, ha participado en la clausura del centenario de la fundación de la Única Cuadrilla de Judíos Arrepentidos de Baena, conocida como los Enlutaos, destacando la relevancia histórica, religiosa y social de esta hermandad, así como del mundo cofrade en general.

Agradecimiento y reconocimiento a la labor cofrade

Con un discurso cercano y espontáneo, Fuentes agradeció la invitación y expresó su admiración por la entrega, la fe y el trabajo que se vive desde dentro de las cofradías. “No es felicidad, lo pido por Dios. Lo que habéis hecho aquí es un acto de devoción y también de comunidad. Hay que reconocerlo”, expresó el presidente

Destacó especialmente la importancia del acompañamiento espiritual de los párrocos y la fuerza social de las hermandades: “Donde no llegan los ayuntamientos, muchas veces llega una cofradía con su cura remangado. Eso no es fácil. Eso es de valientes. Y Baena lo sabe hacer”.

El papel clave de la Iglesia y del patrimonio

El presidente recordó el compromiso de la Diputación con la conservación del patrimonio religioso, como en el caso de la Iglesia de la Merced, y la restauración de imágenes como la de Santa María Magdalena, titular de la cuadrilla de los Enlutaos: “Tenemos que proteger nuestro patrimonio. No solo por fe, también porque forma parte de nuestra cultura e identidad. El arte sacro es una forma de transmitir el Evangelio que no puede perderse”.

Aludió también a la financiación pública del patrimonio religioso: “Cualquiera con dos dedos de frente entiende que hay que mantenerlo. Son templos que se llenan, donde se ayuda, donde se reza y donde se construye comunidad”.

El impacto económico y cultural de la Semana Santa

Fuentes defendió sin complejos el valor económico y social de la Semana Santa: “No solo mueve corazones. También mueve empleo, mueve artesanía, mueve turismo”. En ese sentido, insistió en que hay que defender el modelo andaluz de religiosidad popular, “porque nadie como Andalucía sabe hacer catequesis a través del arte, del paso y del silencio”.

Un acto con memoria, presente y futuro

El presidente tuvo palabras para el pueblo de Baena, para los hermanos de la hermandad, y especialmente para los restauradores, camareras y voluntarios que hacen posible que la devoción se mantenga año tras año. “Lo que hacéis no es mérito nuestro, de la Diputación, que solo administra dinero público. El verdadero mérito es vuestro: de los que sentís, trabajáis, cargáis y cuidáis”, señaló.

Finalizó su intervención con una defensa firme del mundo cofrade: “Que nadie os haga sentir incomprendidos. Las cofradías son más que procesiones. Son una red de ayuda, de tradición, de belleza. Y eso no se puede dejar perder”.

Jesús Joaquín Corredor: “La Iglesia no es sólo templo, es también alma y corazón de un pueblo”

El párroco de Nuestra Señora de Guadalupe reivindica el valor social y espiritual del patrimonio religioso durante la clausura del centenario de los Enlutados.

Al final de la eucaristía el párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, Jesús Joaquín Corredor se dirigió a los asistentes reivindicando el papel de la Iglesia, las hermandades y el patrimonio sacro, no solo como elementos de fe, sino también como motores de vida social y cultural en Baena.

“Los templos no son solo para creyentes; son identidad de todo un pueblo”

Corredor fue tajante al recordar la importancia de conservar los templos y las imágenes religiosas, no sólo por su valor devocional, sino como símbolos colectivos de la historia y el alma de las localidades.

“Cuando uno presume de su pueblo, también presume de sus iglesias. No solo va al castillo o al palacio, va a los templos. Hay quien piensa que sólo los creyentes necesitamos conservarlos, pero también los turistas, los curiosos, los que quieren entender quiénes somos”, señaló.

Crítica con sentido común

Durante su intervención, el párroco recordó una conversación pasada con un político que se negaba a apoyar una restauración religiosa por considerarla “barroca” y ajena a la utilidad pública.

“Le pregunté cuántas personas visitaban el castillo del pueblo en un domingo cualquiera. Se quedó callado. Sin embargo, aquí a esta parroquia los domingos venís más 400 personas. Eso también es servicio público. Eso también sostiene un pueblo”, agradeciendo la colaboración que se ha tenido desde las instituciones

Apoyo institucional sin privilegios

Jesús Joaquín Corredor quiso dejar claro que la Iglesia no pide privilegios, pero sí justicia: “La parroquia ha pagado su parte como cualquier vecino cuando restauramos la fachada. Y cuando la Diputación o el Ayuntamiento colaboran con una subvención, no lo hacen para la Iglesia, lo hacen por el patrimonio del pueblo”.

En este sentido, agradeció públicamente al presidente de la Diputación, Salvador Fuentes, su implicación con la restauración de la imagen de Santa María Magdalena, destacando que “hay que mantener lo que tenemos”.

Francisco Vizcaíno Barea: “Esta hermandad ha sabido escribir su historia, pero aún le queda mucha por contar”

El primer teniente alcalde de Baena, Francisco Vizcaíno Barea alaba la organización del centenario de la Única Cuadrilla de Judíos Arrepentidos y destaca el valor patrimonial, espiritual y social del acto de clausura.

Francisco Vizcaíno Barea, primer teniente de alcalde de Baena, en rueda de prensa, en su intervención durante la clausura, destacó el nivel organizativo de la cofradía y el profundo calado espiritual y cultural de la efeméride.

“Tienen mucha solera y mucho oficio”

Vizcaíno no escatimó elogios hacia la hermandad, a la que definió como una hermandad “muy bien organizada, con mucha tradición y mucho oficio a la hora de realizar actos”. Hizo un recorrido por el desarrollo de todos los eventos del centenario, calificándolos de “extraordinarios”, y subrayó el acierto de clausurar el ciclo con la onomástica de Santa María Magdalena, imagen titular de la cuadrilla.

La clausura, incluyó una conferencia a cargo de la restauradora Ana Infante, que explicó los detalles del proceso de conservación de la imagen de María Magdalena. Vizcaíno calificó su intervención como “una clase magistral sobre restauración” y recordó la necesidad de cuidar y preservar el patrimonio como parte fundamental de nuestra identidad.

“Aún queda mucha historia por escribir”

Vizcaíno se refirió también a la profundidad histórica de la cofradía, recordando que la imagen titular ya estaba documentada en el año 1706. “Si ahora celebramos el centenario de la cuadrilla, imagínense lo que queda por delante… le queda mucho recorrido afortunadamente”, apuntó.

También tuvo palabras de agradecimiento para la hermandad por haberle invitado a participar, trasladando su “reconocimiento y gratitud” a quienes han hecho posible este centenario, tanto a nivel institucional como personal.

Reconocimiento a las camareras y guardianes silenciosos

En un gesto de sensibilidad y conocimiento del mundo cofrade, Francisco Vizcaíno puso en valor la figura de las camareras, responsables directas del cuidado diario de las imágenes. “Son las que realmente conservan nuestras tallas, y pocas veces se les agradece como merecen”, subrayó. Además, mencionó la importancia de los hermanos, las juntas directivas, restauradores y de todo aquel que aporta ideas para mantener viva la llama de las tradiciones.

Cierre con proyección y compromiso

Finalmente, hizo una reflexión cargada de simbolismo: “Se ha demostrado que esta gente sabe escribir su historia, pero también que tiene mucho que decir aún”. En esa línea, expresó su deseo de que el acto sirva para seguir impulsando la conservación del patrimonio y la promoción de la identidad cofrade de Baena más allá de sus fronteras.