José Andrés García Malagón “es el momento de invertir y apostar por la gente y hacerlo todos juntos”

El concejal socialista de Baena y portavoz municipal de su grupo, José Andrés García Malagón, sobre la posibilidad de ser alcalde y de su primera medida, comentó que ahora hay que hacer un plan impactante, de choque, porque hay personas que salen a flote milagrosamente y lo pasan mal”, añadiendo que es el momento de invertir y “apostar por la gente y hacerlo todos juntos”.
“Ellos sabrán lo que han firmado”, señaló refiriéndose al pacto  PP-CS para que Ramón Martín sea alcalde en junio. Y que la verdad en la moción de censura presentada y retirada el pasado año “tendrá que decidirla un juez”.
En el plano personal dijo García Malagón que “la mejor decisión de mi vida fue volver a Albendín”, en el regreso del espacio de entrevistas “Café para Tres” a cargo del párroco Juan Laguna.
Nacido en Baena hace 40 años, formado en Madrid, trabajando en informática hasta que regresó a su tierra y empezó en 2004 su etapa local alejado de aquel mundanal ruido y acompañando a su abuela. 
Y llega a la política echando mano de la memoria de su abuelo, concejal y de ser él mismo “muy reivindicativo”.
Involucrado en movimientos asociativos, incluso cofrades, José Calvo Pavón (exconcejal y expedáneo), le conduce a sus 25 años a ese mundo de la gestión pública con el beneplácito de su abuelo.
García Malagón habló de alcalde pedáneo como “político humanizado” e imprescindible pasar por la política local para subir más “porque se llega con mas humanidad y sensibilidad otros cargos, lo que falta hoy”.
Asumió hace meses la portavocía socialista en el Ayuntamiento de Baena de la mano de Jesús Rojano. “En el cuerpo a cuerpo con los otros concejales me llevo bien, aunque en la defensa de lo que creo lo llevo…”.
Sobre la crisis económica que genera la pandemia indicó que no hay varita mágica y que Baena “tiene un tema estructural”, refiriéndose al monocultivo del olivar que “precisa una diversificación, por ejemplo, con el turismo, su historia y patrimonio”.
Habló de apostar por las potencialidades de la ciudad y de la necesidad de “creer en ellas” y de “comprar y consumir en casa”.