Baena alza la voz contra el genocidio en Gaza, «esto no se puede permitir ni un minuto más»

La Plaza de la Constitución de Baena acogió un acto de indignación y repulsa ante el genocidio en la Franja de Gaza. La alcaldesa, María Jesús Serrano, y el presidente de la Fundación Savia, Francisco Casero, encabezaron una concentración que culminó con la lectura de un contundente manifiesto por parte de representantes de distintos colectivos sociales.

Con un silencio cargado de dolor y una plaza que sirvió de altavoz para la conciencia colectiva, Baena expresó su más firme rechazo al genocidio que sufre el pueblo palestino. Al acto que contó con el presidente de la Fundación Savia, Francisco Casero, asistieron vecinos y vecinas de todas las edades, representantes de asociaciones y miembros de la corporación municipal.

La alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano Jiménez, abrió el acto indicando que “aunque seamos un pueblo del sur de Córdoba, no podemos callar, lo que ocurre en Gaza es una masacre, un genocidio, y no podemos mirar hacia otro lado mientras mujeres, niños y ancianos mueren sin ayuda humanitaria, sin comida y sin voz”.

Serrano agradeció a Francisco Casero, su constante compromiso social y explicó cómo surgió la iniciativa, “Paco me envió un mensaje hace un mes, pidiendo apoyo para el manifiesto. Le respondí que, en cuanto acabara la feria, Baena también alzaría la voz”.

Francisco Casero, «la guerra no llama a la paz»

Con su tono pausado y reflexivo, Francisco Casero habló con crudeza sobre las cifras del horror en Gaza y sobre la deshumanización del conflicto, “más de 67.000 personas asesinadas, entre ellas 20.000 niños. ¿Cómo puede el mundo mirar hacia otro lado? ¿Dónde están los valores de Europa? ¿Dónde están los derechos humanos?”.

Casero denunció la militarización de la ayuda humanitaria por parte de Israel, el negocio internacional de la guerra y la complicidad de los países occidentales, “con los 2,4 billones de euros que se gastan en armamento, podríamos acabar con el hambre en el mundo, pero no interesa, la guerra genera dinero, la paz no”.

También hizo un llamamiento a la unidad y a superar divisiones ideológicas, “este no es un problema de izquierdas ni de derechas, es una cuestión de humanidad, de dignidad, de los derechos de los pueblos, la sociedad andaluza lo ha entendido, y ya hemos recogido 2.000 adhesiones de todos los sectores”.

Lectura del manifiesto.

Después de las dos intervenciones de paso a la lectura del manifiesto, firmado por organizaciones como UNICEF, Médicos Sin Fronteras, Oxfam Intermón, Movimiento por la Paz, entre otras. Fue leído por representantes de distintos colectivos de la sociedad baenense.

El manifiesto denuncia que Gaza se ha convertido en un símbolo brutal del sufrimiento humano, con cifras estremecedoras: Más de 56.000 muertos, 18.000 niños y niñas asesinados; más de 127.000 personas heridas, muchas con mutilaciones permanentes y 500.000 personas al borde de la inanición, según Naciones Unidas.

Además, el texto acusa directamente al gobierno de Israel de violar el derecho internacional, bloquear la ayuda humanitaria y utilizar el castigo colectivo como arma de guerra, militarizando los corredores de ayuda y bombardeando puntos de socorro.

En el texto se subraya que “no es una súplica, es un grito, es un puño sobre la mesa de la indiferencia. No se puede permitir más. Con cada niño muerto, con cada madre rota, algo de nosotros también desaparece”.

El manifiesto exige a Israel y a la comunidad internacional que “cese de inmediato los bombardeos y el castigo colectivo; la entrada masiva de ayuda humanitaria sin condiciones; el respeto al mandato de Naciones Unidas y sus agencias y la protección efectiva de la población civil conforme al derecho internacional.

El acto concluyó con un minuto de silencio en memoria de las víctimas, seguido de un aplauso donde se puso de manifiesto que “la historia no juzgará lo que dijimos, sino lo que hicimos o no hicimos”,