Altruismo y solidaridad en Nueva Carteya

En declaraciones a este medio, Anabel Tapia, concejala de Binestas Social, Turismo y Comercio del Ayuntamiento de Nueva Carteya, hizo referencia a la fabricación de mascarillas que, por parte de vecinos y particulares del municipio cordobés, se está llevando a cabo durante el actual período de confinamiento en el que nos encontramos: “desde que empezó el estado de alarma, muchos vecinos se pusieron en contacto con el ayuntamiento, para colaborar en todo aquello que fuera posible, por ejemplo, con el cuidado de personas mayores, para coser mascarillas o para desinfectar el pueblo, haciendo uso de maquinaria agrícola. Actualmente, estamos coordinando, desde el consistorio, con la colaboración de protección civil y de varios vecinos y vecinas de la localidad, la fabricación de mascarillas: nosotros, desde el ayuntamiento, nos encargamos de la compra del material y lo distribuimos en función de las direcciones que nos proporcionan. Posteriormente, una vez que estas han sido elaboradas, se procede a su recogida y posterior traslado a la escuela infantil del municipio, dónde se desinfectan, empaquetan y distribuyen. Hoy en día, se estima que hemos elaborado en Nueva Carteya, aproximadamente, unas 1900 mascarillas. De estas, se han repartido varias entre los comercios, encargados de abastecer de víveres básicos al municipio, así como se han repartido entre diversas residencias de la provincia”. 
Por otra parte, Tapia agradeció la labor desarrollada por todos aquellos vecinos de la localidad, que “de manera constante, altruista y solidaria”, trabajan desde sus hogares, elaborando mascarillas, para proteger al resto de la ciudadanía: “estos ciudadanos, sin saberlo, a través de este tipo de gestos y acciones, engrandecen y enorgullecen nuestro pueblo”.
En lo que se refiere al cuidado y atención de los más mayores de la localidad, Anabel Tapia incidió: “desde el consistorio, mantenemos un contacto permanente con servicios sociales, en el caso de que alguno de los ancianos de Nueva Carteya no disponga de familia que cuide de ellos: la mayoría tiene familia y están totalmente atendidos. Aquellos que no, desde atención a domicilio, se les sigue atendiendo. Además, propios vecinos colaboran y los comercios locales les distribuyen la comida y enseres básicos”.