El párroco de Santa María la Mayor y San Bartolomé de Baena, Juan Laguna, comentó que esta última iglesia no tiene deuda alguna por sus actuaciones en materia de restauración. “Es una parroquia muy generosa en proporción a fieles y habitantes, con respecto a otras”, afirmó.
Si semanas atrás se ha hablado de las campanas o del monaguillo, hoy la justificación en el espacio «En el cajón de la sacristía” para hablar de lo mundano y de lo divino, de lo cotidiano y de lo profundo de una forma espontánea, directa, sencilla y divertida, ha sido el confesionario
Confesionarios que los hay de distintos tamaños y modelos, clásicos, modernos y que todos encierran muchas historias de amor, fe y esperanza.
Un dato sin entrar en profundidades y sin desvelar secreto alguno “las mujeres se confiesan más y tardan más en confesarse que el hombre, dan más circunloquios, le dan un toque femenino”, aseguró Laguna
Y ha indicado que, en vez de vivir tan agobiados, hay que buscar “el mejor remedio para los problemas del alma, la ansiedad, la depresión… en quien entiende el corazón del hombre porque se hizo hombre sin dejar de ser Dios”.
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