El hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Baena ha hablado sobre el cabildo de la entidad que habitualmente analiza, entre otras cuestiones del orden del día, la Cuaresma-Semana Santa que este año tampoco pudieron celebrase en las calles.
Javier Valbuena considera que el restaurador egabrense Salvador Guzmán se merece el reconocimiento del cabildo, por, pese a estar convaleciente, poder terminar de restaurar la imagen de la santa Verónica como ha hecho con otras tallas de la cofradía por elección como candidato a esos trabajos por parte de la entidad y siguiendo el plan restaurador iniciado en 2019 que continuará con la Vera Cruz.
En el centenario de la 5ª Cuadrilla de Judíos de la Cola Negra, según Valbuena, el cuadrillero Francisco Tovar “matizó algunas cosas que no habían quedado claras en los cabildos, pero es el espíritu de nuestra cofradía y su riqueza, siempre tiene algo que decir”.
En la reunión, el hermano mayor expresó su idea que en ese tema del centenario son cosas que deben quedar entre los cuadrilleros, convencido de que “cada cofrade de eta cofradía debe manifestar sus inquietudes”.
Los nazarenos recuperaron un novenario de la Virgen de los Santos de 1804 y le han dado una copia a la cofradía.
Y sobre un libro “mal llamado de las Constituciones” de 1817, aseguró “son la mayoría actas de la 2ª Cuadrilla de Nazarenos que deben quedarse allí”.
En ese cabildo intervino el consiliario ante un planteamiento de un cofrade que consideraba había habido un desamparo por la cofradía en cuaresma y Semana Santa, según dijo el sacerdote. Juan Laguna entiende legítimo que se plantee cualquier asunto en cabildo, pero no que se haga cuestión general de una sensación particular “para en una carta trasladárselo al Obispo y que este consiliario no sirve, que venga otro”.
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